lunes, 22 de julio de 2013

ERMELUND


En abril de 2002 conocí a Don Atilio Galaz M. A esa fecha creo tenía 91 años y muy amable, junto a su esposa, me recibió en su hogar para brindarme una entrevista. Supe de él en el 19 Jamboree Mundial de 1999 realizado en Picarquín, Región de O´higgins, Chile. Como parte del equipo de comunicaciones del encuentro me enteré que fueron a saludar a la delegación de Dinamarca algunos veteranos scouts chilenos que habían formado parte, ni más ni menos, de los 37 que en ¡¡1924!! viajaron hasta el campo de Ermelund, Copenhagen, Dinamarca, y fueron parte del Segundo Jamboree Scout Mundial. Con BP incluido. Testigo en primera fila de la historia del Movimiento era una gran oportunidad conversar con él y conocer de su experiencia, no sólo en el Jamboree Mundial, sino también del quehacer cotidiano de los scouts en Chile a inicios del siglo pasado.
En otra ocasión espero publica en este blog esa entrevista. Por ahora les cuento que como un gesto de agradecimiento a los scouts daneses y a las familias de ese país que los recibieron; Don Atilio junto a Jorge Herrera B y Osvaldo Gallardo P publicaron este libro "Las llamas de las fogatas de Ermelund aún no se apagan", y junto a un galvano conmemorativo, entregaron un ejemplar a cada scout danés que asistió al Jamboree de Picarquín. Dicen que fue su manera de saldar una "deuda de gratitud".
Tengo la fortuna de tener un ejemplar con dedicatoria de Don Atilio y lo atesoro como una reliquia. Según sus autores la mayor parte de la narración es copia fiel de sus "bitacoras de viaje". Una aventura que se extendió por cuatro meses y medio a bordo del barco "Orcoma" que salió desde Valparaso rumbo a Europa con paso por el Canal de Panamá. A modo de contexto basta recordar que recién en 1927 Lindbergh logró un vuelo sin escalas sobre el Atlántico.
Un dato a destacar. Al Segundo Jamboree Scout Mundial en Dinamarca acudieron representaciones de 34 paises. Chile fue el único sudamericano que acudió con Tropa, 30 niños organizados en 3 "Decurias" como se llamaban por esos años. Toda una hazaña.

¡¡Buena Caza!!
 

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